IOIOIOIOIOIOIOIOIOIOIOIOIOIOIOIOIOOOIO
Todo lo dulce y amargo
brotó de un solo instante:
tiempo espacio
sacrificados
al día que llegaba entre cenizas.
Visión, su luz, para vivir.
Cerrazón, su luz, para no saber vivir
sino atada a las manos
que escribieron la primera
y la última palabra.
Abarqué en la penumbra
todas las primaveras,
los soles,
los diminutos puntos de fuego
de todas las esquinas
y los puertos;
de todas las hogueras
que llamean
en la sombra que me cubre.
¡Todo el mar no bastó
para dejar sin huella
el breve trigo que dejó tu beso!
IOIOIOIOIO___OIOIOIOIOIOIOIO
Otra vez el amor (4)
Si intentaras abarcar
con la mirada
toda la tempestad
que nubla mis sentidos,
tú -pequeño dios errante-
dudarías entre el llanto
y la rabia
de tus ojos vencidos.
Y acaso,
náufrago indeciso,
querrías compartir mi tempestad,
en este universo donde el calor
y la furia de mis besos,
te dejaran -apenas-,
sensación,
olor,
quietud de olvido...
Caes, caigo
en el abismo
de una lágrima:
agua que no es agua.
Sal que no admite lo salobre.
Trémula ¿de dónde llega?
¿Hacia dónde alza
su breve bastión de tiempo ido?
¿En qué iris descompone
su color, su forma vieja
de cristal y olvido?
Agua que no es agua,
ni sabor, ni aliento a rosa.
Dolor deshabitado,
precipitada nube
hacia la tierra que es pecho,
voz, candente forma.
Luz que no es luz
sino quebrada arista,
intangible diamante,
rabia volátil,
encrespada negrura,
hierba,
fuego,
luz...
OIIOIOIOIOIOIOIOIOIOIOIOIOIOIOIIOO
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