.......mecedora, te mantiene ocupado, pero no te lleva a ninguna parte
Un hombre
de negocios hizo un cuadro de preocupación, en el cual registraba todas sus
preocupaciones y aflicciones. Luego de un año de hacer esta tarea, decidió
observar los resultados.
Se
encontró con que el cuarenta por ciento de sus ansiedades se habían convertido
en cosas cuyas probabilidades de concretarse eran muy reducidas. El treinta por
ciento eran acerca de decisiones que había tomado y que podía deshacer.
El doce
por ciento de sus preocupaciones se basaban en las críticas de los demás, y el
diez por ciento restante era por su salud futura (lo cual incluía una úlcera a
causa de las preocupaciones).
Solo la
mitad del último diez por ciento eran asuntos sobre los cuales no tenía
control. Al final, este señor concluyó que solo el ocho por ciento de sus
preocupaciones pasadas habían sido legítimas.
¿Por qué
se está preocupando en este momento? ¿Qué le parece convertir su tiempo de
preocupación en tiempo de oración? Es asombroso cómo nos aliviamos de nuestras
preocupaciones cuando conversamos con Dios acerca de ellas y, en efecto, se las
entregamos a Él. Y no agregue, preocupación por cómo orar en su lista de
compromisos.
Si no
encuentra palabras para expresar sus problemas, Dios conoce su corazón y su
mente y lo escucha aun si no habla. Solo siéntese con tranquilidad y llénese de
su bondad.
Posted: 15 Apr 2014 10:29 AM PDT
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